El señuelo de América prendió muy bien entre los habitantes de Balmaseda que pasaron a engrosar las listas de Pasajeros a Indias en los siglos XVI y XVII. En buena parte dedicados al Comercio, marcaron además un triángulo mercantil con Sevilla y Cádiz, en siglos posteriores. Los Indianos de mayor patrimonio fueron generosos en sus Fundaciones religiosas y sociales durante los primeros siglos en América. Y, ya en el siglo XIX, como emprendedores industriales en suelo americano, sobre todo en México, su regreso trajo prosperidad a la villa natal mediante fundaciones educacionales y creación de empresas.
Balmasedanos en América entre los siglos XVI y XX
Ponencia presentada por la Dra. Julia Gómez Prieto, en el XV Congreso Internacional de la Asociación de Americanistas . Celebrado en la Universidad de Deusto 12-14 Setiembre 2012. Mesa III : Los Vizcaínos y América. Moderadora : Dra. Begoña Cava.
INDICE :
1.- BALMASEDA, una villa vizcaína
La villa de Balmaseda está situada en la comarca más occidental de Bizkaia, las Encartaciones, de la que se considera su capital. Su ubicación en el Camino Real que unía Bilbao con Burgos, y desde allí con toda Castilla, fue esencial para su devenir histórico, y sobretodo para su desarrollo económico. A través de este Camino, cruzaban a diario por la villa reatas de mulateros portando lanas, grano y las más diversas vituallas tanto para el abastecimiento del Señorío de Vizcaya, como para ser exportadas desde el puerto bilbaíno.(1)
Se celebraban en Balmaseda dos mercados semanales y hasta el año 1841 fue, junto con la de Orduña, una de las Aduanas de Puerto Seco del Señorío; sede así mismo de una importante Judería que desapareció – por expulsión de sus miembros – en el año de 1486. Pero, además del Comercio, era también una villa ferrera con una floreciente industria del cobre y del hierro, cuya producción se exportaba a toda Europa e incluso a América, en forma de diversos artículos que iban desde la clavazón hasta la calderería. Esta industria que se quedó obsoleta en el S.XIX perdiendo el tren de la revolución industrial, desapareció paulatinamente. El comercio, por su parte, quedó herido de muerte con la pérdida del Camino Real, el cual hacia 1770 fue trasladado a la nueva vereda por la Peña de Orduña.
A estas evidentes catástrofes económicas, no fueron tampoco ajenas las cinco etapas bélicas – con sus difíciles postguerras – que entre 1794 (Guerra de la Convención) y 1874 (Tercera Guerra Carlista) asolaron la villa. El suceso más severo de esta época fue el incendio de la villa por las tropas francesas; el 8 de noviembre de 1808, Balmaseda ardió por los cuatro costados durante la Guerra de la Independencia. En Balmaseda el final del Ciclo Demográfico antiguo se sitúa en torno al año 1890; el Económico llega con la crisis industrial en el periodo 1835-1850 y el Social se inicia con las guerras contra Francia y la primera conflagración Carlista, para consolidarse entre 1860-1875, con la inminente proletarización finisecular que habría de ser ya un proceso irreversible.
En su estructura social destacaban dos Grupos de Poder muy fuertes: las Autoridades y el Clero. El Tercer Estado era muy abundante y activo, con un gran desarrollo artesanal. Su población sometida a crisis, epidemias, migraciones y guerras, fue pasando de los 580 habitantes que tenía a finales del siglo XVI, a los 1.690 del año 1796, los 2.410 en el año 1857 y los 3.226 de fines del XIX. Su censo actual es de 7.580 habitantes. ( 1 )
1. 1.- La llamada de América
En el largo periodo que va de comienzos del siglo XVI hasta finales del XIX, fueron múltiples los motivos que indujeron a los balmasedanos a emigrar de su tierra. Sin duda, son las crisis económicas ya señaladas la causa máxima de la emigración decimonónica desde Balmaseda. La mayoría de familias de recursos precarios deciden marchar a América en busca de mejores condiciones de vida. Con la partida de los habitantes más pobres se mitiga en buena medida la depauperación de la villa; si bien entre ellos, marcharon también elementos jóvenes que son los más dinámicos y emprendedores.
En todo el País Vasco se da una emigración selectiva, sin una aparente necesidad económica perentoria, pero como consecuencia directa de la estructura troncal de la familia vasca. La prosperidad del caserío familiar comporta la conservación de casa y apellido durante siglos, mediante el hecho de que toda la herencia familiar recaiga en el primer varón. Así, mientras el primogénito permanece en la casa familiar y las hermanas esperan a casarse, un indeterminado número de varones habían de buscarse su propia vida, llegando algunos, sin embargo, a alcanzar posiciones relevantes de la escala social.
El señuelo de América debió de prender bien en el ánimo de los balmasedanos, sobretodo con la llegada de buenas noticias. Estas sin duda, incitaron los deseos de la gente, que en Balmaseda comenzó a emigrar y siguió haciéndolo en siglos posteriores cada vez en mayor escala. El Comercio, y por ende la riqueza, podría definirse como una importante causa migratoria. En el siglo XVII los vizcaínos acapararon buena parte del monopolio comercial americano estableciéndose en Sevilla y en Cádiz y abriendo desde allí sucursales en América, casi siempre bajo el control de parientes cercanos, lo cual dio origen a comunidades de comerciantes con poder, sobre todo en los núcleos mineros más importantes de México y Perú. ( 2 )
La cuantificación de estas causas permite observar una dicotomía de la emigración balmasedana, por el hecho de que marchan no solamente vecinos con poca preparación , sino también gente instruida y de buena formación.
Hay emigrantes con pocos recursos durante los cuatro siglos estudiados; algunos parten prácticamente con lo puesto, mientras que a otros les espera un empleo u ocupación – proporcionado por sus familiares – al llegar a América. Si en los siglos XVI y XVII se van con el sueño, no siempre cumplido, de llegar a ricos, bastantes de los que emigran en el S.XIX suelen hacer fortuna muy rápidamente y regresan, convertidos en Indianos, al cabo de algunas décadas.
A los emigrantes mejor preparados culturalmente, sus estudios y/o cargos en España les permiten llegar a América para el desempeño de una labor militar o funcionarial especifica. Esta seguridad de ingresos no impide que intenten también acumular fortuna, por lo que, a sus quehaceres habituales, añaden con frecuencia el ejercicio, directo o indirecto, del comercio.
2.- LOS PASAJEROS A INDIAS
En una aproximación a las actividades de los emigrantes balmasedanos en tierras americanas, aquellas pueden desglosarse en al menos cinco diferentes categorías: los Mercaderes de Plata en las minas antes citadas; Comerciantes en general, en algunos casos asociados también a los metales ; los Funcionarios civiles, en las más diversas Instituciones; Cargos militares, en todos sus rangos, hasta Gobernadores; y Oficios de diversa índole.
Los balmasedanos no tardaron muchos años en emigrar hacia América tras el descubrimiento del Nuevo Continente. Aunque los vascos, en un principio, no intervinieron de manera destacada en el comercio trasatlántico, formaban desde antiguo parte de las flotas y así estuvieron presentes en América desde los primeros momentos. Y entre ellos los balmasedanos. Si bien no existen “fuentes documentadas”, se afirma que en la flota de Colón iba un marinero de Balmaseda.
Las Fuentes documentales citan a Sancho Ortiz de Urrutia, de la estirpe de Avellaneda, como mercader americano hacia el año 1508; pero además, un análisis de las series de Pasajeros a Indias, aun con todas las limitaciones que estos pasaportes comportan, permite conocer, al menos a 17 de los balmasedanos que se trasladaron al nuevo continente durante el siglo XVI. Entre los años 1512 y 1593, estos emigrantes tienen como destino favorito Nueva España ( Virreinato de México) ; cuatro de ellos salieron para Perú , alguno para Nueva Granada ( actual Colombia ) y en 1535, un tal Juan de Valmaseda parte para el Río de la Plata, que entendemos se refiere a un lugar de tal nombre existente en la isla de Puerto Rico.( 3 )
En su inmensa mayoría eran solteros, aunque también consta que algunos regresaran al cabo de los años, para volver a cruzar el océano, esta vez con su mujer y algún hijo. No todos hubieron de ser simples emigrantes movidos por la falta de recursos, aunque sin duda muchos sí lo fueron. Hay excepciones realmente interesantes, como las de Miguel de la Cruz Hurtado, hijo del Escribano Público de la villa D. Francisco de la Cruz, que emigró en 1593; o la de Marcos de Zumalabe, nieto del ferrero del mismo nombre, antiguo cargo municipal y propietario, que lo hizo en 1579.
Durante el siglo XVII los vizcaínos acapararon buena parte del monopolio comercial americano estableciéndose en Sevilla y Cádiz, y abriendo desde allí sucursales en América, casi siempre bajo el control de parientes cercanos, lo cual dio origen a comunidades de comerciantes con poder, sobre todo en los núcleos mineros más importantes de México y Perú.( 4 ).
2.1.- La vanguardia: los Urrutia
En los años inmediatamente posteriores al descubrimiento de América, la Corona de Castilla mantuvo el monopolio regio sobre el comercio y los viajes con las Indias hasta 1504. Ese año los Reyes Católicos levantan el derecho exclusivo y con ello muchos comerciantes del país, y entre ellos los hermanos Sancho y Juan de Urrutia, de la villa de Balmaseda, llegan a Sevilla, único puerto desde el que se realizaban expediciones a Indias, con idea de iniciar relaciones comerciales con las regiones recientemente descubiertas De los dos hermanos Urrutia, Juan se queda en Sevilla y Sancho parte hacia las Indias. Este primer viaje se habría realizado a finales de 1507 o comienzos de 1508. Según OTTE (5) tendría a la sazón Sancho de Urrutia unos 30 años. Debió de realizar una intensa labor en la Isla Española, donde sin duda estableció las bases de su futuro comercio trasatlántico. Y creemos lo hizo en la actividad comercial porque su nombre no aparece como Encomendero en el Repartimiento de Alburquerque del año 1514.
Rango y fortuna ( 6) las consiguió Sancho en colaboración con su hermano Juan Ortiz de Urrutia, que desde Sevilla le abastecía de las mercaderías apropiadas. Juan y Sancho establecieron así una “entente” comercial entre Sevilla y Santo Domingo, línea de negocios a la que se fueron uniendo progresivamente otros vascos importantes, ya fuesen los Matienzo u otros varios más. Sancho Ortiz de Urrutia fue también uno de los primeros vizcaínos en traficar con Tierra Firme. En 1519 aparece como armador de viajes de rescate a la costa de Cumaná, donde participa en las expediciones perleras. Además, algunos años antes, hacia 1515, Sancho había empezado a trabajar con otro mercader vizcaíno, Domingo de Ochandiano, que más tarde sería Contador de la Casa de Contratación.
A finales de 1525 Sancho Ortiz de Urrutia se asienta definitivamente en Sevilla, donde va dejando cada vez más los negocios en manos de su sobrino Juan de Urrutia, quien a su vez va trasvasando progresivamente sus negocios a Tierra Firme. Pero la muerte de su hermano – en 1549 – debió afectar mucho a Sancho quien, a pesar de sus florecientes negocios y de los honores alcanzados, – entre los que se encontraba su nombramiento como Regidor de Puerto Príncipe en Cuba y tenedor de los Bienes de Difuntos en la Española – cada vez delega mas los asuntos en manos de su hijo Juan, que desde 1.520 estaba con él en América. Con estos cambios, toma el relevo la segunda generación de los Urrutia – los dos primos Juan de Urrutia – y con ellos los negocios tendrán un cariz distinto, en el que la trata de negros hará su aparición.( 7 )
Pensando en la muerte y en su panteón, Juan de Urrutia padre, había pedido permiso al Cabildo y Regimiento de Balmaseda, para construirse una capilla lateral en la parroquia de San Severino. Se lo conceden el 14 de diciembre de 1534 y se la encarga a Juan de Rasines, afamado arquitecto residente en Sevilla quien terminó las obras en 1541. El altar, que es la joya de la capilla, representa un calvario con hermosa imaginería de la escuela de Guiot de Beaugrant; y aunque se atribuye el Cristo a Martínez Montañés se dice que fue traído desde Sevilla. En 1543 funda en esta capilla una doble Capellanía que encarga a su primo Juan de Machón y al bachiller García de Velasco, ambos clérigos beneficiados de San Severino; tenían una asignación de 30.000 maravedíes de renta perpetua cada año.( 8 ).
Ampliar información en Balmaseda y América: La Vanguardia, los Urrutia
2.2.- Pasajeros a Indias de Balmaseda, en los siglos XVI y XVII
Embarque
|
Apellido
|
Nombre
|
Destino
|
1512/02/27
|
Puente
|
Juan de la
|
No consta
|
1512/02/27
|
Bolinar
|
Pedro de
|
No consta
|
1513/09/02
|
Carranza
|
Diego de
|
No consta
|
1535/07/23
|
Valmaseda
|
Juan de
|
Río de la Plata
|
1536/04/24
|
Urrutia
|
Juan de
|
Puerto Rico
|
1537/01/04
|
Velasco
|
Juan de
|
Perú
|
1537/01/04
|
Velasco
|
Pedro de
|
No consta
|
1538/03/13
|
Matienço
|
Diego de
|
Santo Domingo
|
1538/04/03
|
Cruz (*)
|
Francisco de la
|
Nueva España
|
1538/09/27
|
Golibar
|
Diego de
|
Tierra Firme
|
1555/00/00
|
Gaona
|
Juan de
|
Perú
|
1565/09/05
|
Bergaray
|
Francisco de
|
Perú
|
1566/04/26
|
Velasco
|
Juan de
|
Nueva España
|
1579/01/12
|
Zumalaver (**)
|
Marcos de
|
Nueva España
|
1579/01/26
|
Brucena
|
Lope de
|
Perú
|
1590/04/06
|
Cruz
|
Juan Antonio de la
|
Nueva Granada
|
1590/06/26
|
Uribarri
|
Santiago de
|
Nueva España
|
1593/01/27
|
Cruz Hurtado
|
Miguel de la
|
Perú
|
1633/04/15
|
Puente Veraztegui
|
Fco de la
|
Tierra Firme
|
1680/12/05
|
Soberado
|
Manuel de
|
Quito
|
1695/02/07
|
Belasco
|
Joaquín S.J.
|
Perú
|
(*).-Francisco de la CRUZ, natural de Balmaseda (Vizcaya) que partió como Pasajero el 3 de Abril de 1538, falleció en Nueva España el año 1595.
En 1590 Juan Antonio de la CRUZ, posible hijo del anterior, fue pasajero para Nueva Granada el día 6 de Abril. Acompañaba a Francisco Velazquez, Escribano de Cámara de la Audiencia del Nuevo Reino de Granada
(**).- Marcos de ZUMALABE (Zumalaver), estaba bautizado el 1 de Marzo de 1545 en San Severino de Balmaseda. Era hijo de Juan de Zumalabe y Ortiz de Haedo y de Catalina Hernández de Salinas y Terreros. Marcos tiene la gloria de ser de los primeros que comenzó a labrar el hierro y cobre con el procedimiento de los martillos de agua ó martinetes; procedimiento desconocido en el resto de España. Parece que en 1579 estaba viudo y quizás por eso se embarcó para América.
En las listas de Pasajeros del siglo XVII solamente aparecen tres personas con origen de Balmaseda; sus circunstancias personales son absolutamente dispares. Veamos:
1. Francisco de la PUENTE VERASTEGUI, está casado y es mercader. Se va a Tierra Firme, el 15 de Abril de 1633, por un período de tres años, para vender y beneficiar las mercaderías que lleva consigo en el viaje.
2. Manuel de SOBERADO (ó Sobrado), es soltero y embarca el 5 de Diciembre de 1680 con destino a Quito. Va como criado de D. Juan de Orozco, Corregidor de la ciudad de San Francisco de Quito.
3. Joaquín de BELASCO (ó Velasco), es padre jesuita y embarca el 7 de Febrero de 1695, con destino a Perú. Será el nuevo Superior de la Misión de Juli a orillas de Lago Titicaca.( 9 )
Con respecto a la Misión jesuita de JULI, fue la primera formada en Suramérica y tuvo una importancia esencial en la conformación de los otros poblados, tanto por la experiencia urbana acumulada cuanto por la estructura de carácter administrativo y económico que devengó este experimento. La Misión de Juli se encontraba sobre el Camino Real de Cusco a Chuquiabo (La Paz) lo que conllevaba el tener que atender huéspedes “por estar en camino tan pasajero”. ( 10 )
2.3.- Otros Pasajeros
– Bernal de BRUCEÑA, natural de Balmaseda (Vizcaya). Falleció abintestato en Potosí. Año 1603. En el año 1579 fue como Pasajero a Perú, Lope de Bruceña, natural de Balmaseda.
– Juan SUBRIGAL (¿Sabugal?) de la Fuente, natural de Valmaseda (Vizcaya) finó en Guanajuato. Año 1605.
– Juan de SABUGAL, natural de Balmaseda (Vizcaya) finó en el Real de Santa Fe, minas de Guajuanato en Nueva España con testamento. Año 1614.
– Diego de la PUENTE ALTAMIRA, natural de Balmaseda (Vizcaya) y fallecido abintestato en Guadalajara de Indias. Año 1690.
– Joseph de MACHIN Y ARTEGA, natural de Balmaseda para pasar a Buenos Aires y vivir en compañía de su tío Juan Francisco de Ugarte y Arteaga. Aranjuez, 9 mayo 1777
– Joseph Antonio de los HEROS, natural de Balmaseda (Vizcaya), finó en Cádiz con testamento Año 1787. ( 11 )
Ampliar información en Pasajeros a Indias en los Siglos XVI y XVII
3.- Los INDIANOS BENEFACTORES:
Indiano fue la denominación coloquial del emigrante español en América que retornaba rico, una tipología social que se extendía a sus descendientes, con connotaciones admirativas o peyorativas según el caso. 3
Por lo general los indianos se convirtieron en líderes locales en la época del caciquismo de finales del XIX y comienzos del siglo XX. Justamente un periodo en el que grandes contingentes de jóvenes de Galicia, Asturias, Cantabria, el País Vasco, Cataluña y Canarias, se vieron obligados a «hacer las Américas», emigrando en busca de una mejor fortuna hacia el Cono Sur, es decir en países más al sur de los tradicionales hasta entonces. Hablamos de Argentina, Chile y Uruguay principalmente. ¿Llegaron también hasta allí los balmasedanos? Nos encontramos en esa etapa de la investigación.
Aquí se da una dicotomía pues algunos no tuvieron tanta fortuna, y no encontraron mejor destino en América que la pobreza de la que huían. Aun a pesar de la solidaridad del grupo vasco en destino, que normalmente los ayudaba mucho. Eran casi como una piña. Otros sin embargo acudían reclamados por sus familiares ya establecidos allí, formándose negocios familiares de notable éxito.
Fueron muy numerosas y de índole diversa las aportaciones que ayudaron al vecindario de Balmaseda en la Instrucción, la beneficencia y la mejora espiritual. En los siglos XVI y XVII todas las aportaciones llevadas a cabo por estos emigrantes, estaban relacionadas con la necesidad que sentían de asegurarse la salvación eterna. Para ello invertían en misas y legados para capellanes que rezasen por sus almas, o bien en ayudas diversas para los pobres.
Aportaciones de balmasedanos importantes en América
NOMBRE | FECHA DOCUMENTAL | LUGAR / RESIDENCIA | FUNDACIÓN |
Juan de la Puente | 1571 | Potosí (Perú) | Pósito de Trigo |
Francisco Ortes de Velasco | 1600 | Cartagena de Indias | Trigo de Pobres |
Juan Sabugal de la Puente | 1611 | Minas de Guanajuato | Indotadas |
Antonio de Trucíos | 1620 | Zacatecas (México) | Capellanía |
Juan de la Piedra | 1643 | Panamá | Convento de Clarisas |
José de Larrazabal (12) | 1711 | Lima (Perú) | Terno de Plata |
Hilario de Taramona | 1802 | Lima (Perú) | Hospital Nuevo |
Elaboración Propia
3. 1.- Pósito de Trigo y Arca de Misericordia
Siendo Balmaseda una zona deficitaria en grano, que se traía de Castilla, tuvo sin embargo un Pósito de Trigo que sin embargo no lo creó la municipalidad sino que fue una fundación privada. En 1571, el balmasedano Juan de la Puente murió en Potosí, en las minas de plata del Alto Perú, donde estaba afincado. Dueño de una gran fortuna, legó 500 ducados de oro al Ayuntamiento para comprar trigo, que tras almacenarlo fuera repartido a los pobres de la Villa en épocas de escasez y hambre. El día 20 de Setiembre de 1573 se dictó el Decreto de Creación al tiempo que la Orden de Gobierno del Pósito abría un libro municipal llamado «Arca de Misericordia». La pésima gestión de este Pósito por parte de sus mayordomos terminó con él hacia 1620 y ningún intento para rehacerlo tuvo fruto. ( 12 )
3. 2. -Fundación del Convento de Santa Clara
D.Juan de la Piedra Verástegui, era un cargador y mercader de plata, natural de Balmaseda y vecino de Sevilla que, por encontrarse enfermo en 1643 en la ciudad de Panamá, testó “esperando flota o galeón para volver a España”. El testamento tenía como objeto principal la fundación de un Convento de Religiosas de Santa Clara en zona extramuros de Balmaseda. El legado consistía en pesos de plata doble, marcos labrados de plata, joyas, cajones de añil y varias escrituras de tributos que el testador poseía en la ciudad de Sevilla. A este fin, con el remanente de sus bienes y tras su fallecimiento en Setiembre de 1644, se comenzó a construir la iglesia del Monasterio y la fábrica conventual.
Con 15 religiosas comenzó la vida en el nuevo recinto; seis procedían del Convento de San Martín de Don como fundadoras y otras tres novicias eran parientes del fundador y dotadas con su capital. Además, D.Juan de la Piedra había constituido un Fondo de Indotadas que permitiera entrar en religión a las jóvenes de Balmaseda que, deseando procesar, no dispusieran de caudales para la Dote. La fábrica llevó adosada una Iglesia, con coro a los pies; así como una hermosa Casa donde residía tanto el Capellán como el Preceptor. El Convento, que no fue desamortizado, se declaró “monumento histórico-artístico “en 1984 y vendido a un particular que lo convirtió en el Hotel San Roque, años después. La Iglesia es hoy en día un Museo y la Casa fue restaurada ( 13 )
Ampliar información en El Convento de Santa Clara: 1666 – 1984
3. 3.- Preceptoría de Gramática y Repasante
La fundación del Convento de Clarisas llevaba añadida la creación de una Preceptoría de Gramática,para que los niños de Balmaseda recibieran educación e instrucción por medio de un Preceptor al que podría ayudar un Repasante. Los Patronos del Convento y el Cabildo Eclesiástico de la Villa debían encargarse de adjudicar la plaza de Preceptor con un sueldo asignado también para el ayudante. Pomposamente se le llamaría Cátedra de Latinidad, haciéndose cada vez más exigentes las oposiciones para acceder a ella.
Aún siendo de fundación privada, esta Preceptoría llegó a gozar de gran prestigio y arraigo en Balmaseda; por eso, cuando a finales del siglo XVIII, las monjas clarisas dejaron de mantener al Preceptor por falta de fondos, el Ayuntamiento, tras perder un litigio con las monjas, no dudó en sostener la preceptoría, asignándole una renta de 3.300 reales al año ( 14 ).
3. 4. – Capellanías y Obras Pías
Los Indianos fueron generosos en este tipo de fundaciones, en las que el Capellán debía de ser algún pariente suyo, hasta el 4º grado, que rezase misas por el alma del fundador. Durante el siglo XVI hubo dos Capellanías de Indianos: la de Trucíos y la de Sabugal. Y dos Obras Pías: una conjunta a la capellanía de Sabugal y otra a la fundación del convento por Juan de la Piedra. En ambos casos destinadas a Dotes para mujeres pobres que o bien se casaran o bien profesaran en religión. .
– Antonio de TRUCIOS, que residía en Zacatecas en México, hizo un envío que consistía en una barra de plata quintada de 556 pesos y varios tomines de oro a su hermano Juan de Trucíos, vecino de Sevilla, donde vivía en la Colación de San Salvador, para que el valor de dicho envío se invirtiera en censos de renta, regular y segura, cuyos intereses permitieran mantener la fundación, constituida en el año 1627 por un tercer hermano, Vicente de Trucíos, como albacea de esta fundación de capellanía indiana en Balmaseda. ( 15 )
– Juan de SABUGAL y la PUENTE, que era vecino y mercader de plata en las minas de Santa Fe en Guanajuato en México fundó en 1634 la segunda Capellanía de renta indiana en Balmaseda. La dotó con 7.000 pesos de plata que destinó a fundar Capilla y al mismo tiempo también una Obra Pía para entregar dotes a las doncellas o viudas jóvenes – huérfanas y pobres – que desearan contraer matrimonio. ( 16 )
3. 5.- Mejoras en Balmaseda
Con fecha 19 de Marzo de 1797, se decreta pedir dinero a los balmasedanos residentes en América para efectuar reparaciones en la iglesia de San Severino. Los primeros en contestar fueron la Marquesa de Legarda, D. José Antonio de Areche y D. José de Arnaiz que donaron importantes cantidades cada uno.
( 17 )
En el año 1852 se pidió de nuevo ayuda para instalar Fuentes Públicas en la Villa y en 1880 para urbanizar las calles y reformar la Plaza de San Severino: “ todo ello se hizo con fondos remesados desde América por algunos buenos hijos del pueblo, en quienes la distancia no ha amortiguado el amor y el cariño a suelo natal ”
( 18 )
4.- LOS FUNDADORES EN AMÉRICA:
4.1.- La Ciudad de Matanzas en Cuba
Severino de Manzaneda y Salinas de Zumalabe, nació en Balmaseda en 1644. Era Caballero del Hábito de Santiago y militar de carrera. Tuvo una impecable Hoja de Servicios durante los 20 años que sirvió al Rey de España, Carlos II. Fue Capitán de Infantería de Caballos coraza y había servido en Sicilia, El Rosellón, y Flandes. Y por fin en 1689 solicita la Licencia del Ejército. Le destinan a Cuba como Gobernador y Capitán General de La Habana e Isla de Cuba.
La ciudad de Matanzas, Cuba, se encuentra situada en la costa norte de la isla próxima a la bahía del mismo nombre y en la desembocadura de los ríos de San Juan y Yumurí, que la dividen en tres secciones, comúnmente llamadas Matanzas, Pueblo Nuevo y Versalles. En 1690 el rey de España por real cédula de 25 de septiembre ordenó poblar la bahía y puerto de Matanzas. El 12 de octubre de 1693 el mariscal Severino de Manzaneda, capitán general y gobernador de Cuba, fundó el asiento con el nombre de San Carlos y San Severino de Matanzas; y dio población a treinta familias oriundas de las islas Canarias a las que repartió el terreno que correspondía al lugar, mas cuatro caballerías de tierra y el corral. Al mismo tiempo se puso la primera piedra del templo el 13 de Octubre de 1694.
Por esos años, quien controlaba La Habana controlaba los accesos al Nuevo Mundo. Por eso se había recomendado la fortificación del puerto de Matanzas, espoleado bastante a menudo por los ingleses y holandeses. Con vista a un mayor poblamiento se decidió la construcción de un fuerte que protegiera la entrada del puerto. Se tomó como ejemplo el fuerte de San Agustín en La Florida, y fue Severino de Manzaneda el encargado de ejecutarlo. Por esto precisamente se le recuerda en Cuba, como el constructor del Fuerte de San Severino de Matanzas. ( 19 )
4.2.- Santuario Las Nazarenas, Lima: Sebastián de Antuñano
Sebastián de Antuñano y de las Rivas era natural de Balmaseda donde fue bautizado el 20 de Enero de 1652, siendo hijo de Miguel de Antuñano y de María San Juan de las Rivas, ambos de la misma villa. Con solo 15 años se embarcó desde Cádiz hacia el Perú, el año de 1667, con la idea de labrarse un porvenir y tuvo la suerte, al llegara a Lima, de ser protegido por un acaudalado paisano – Nicolás de Olabarrieta, Caballero de la Orden de Santiago y con fama de rico mercader – quien le dio trabajo en sus negocios y lo envió de vuelta a España pasando por Panamá – donde estuvo dos años – y llegando a Madrid a finales de 1671. Una vez instalado en Madrid, al orar frente al Cristo de La Fe, sintió una suerte de llamado sobrenatural que le pedía cuidar de una obra de mucha honra y gloria de Dios.
Decidió regresar a Lima en 1673 donde, Sebastian, que era muy hábil para los negocios se hizo en corto tiempo con una respetable fortuna – se dice que unos 15.000 pesos – haciendo tratos con Colombia, Panamá y Venezuela. En el año de 1684 hizo unos días de ejercicios espirituales en el noviciado de los Jesuitas de Lima y puso en marcha la promesa que hiciera en Madrid.
Por esa época, en el lugar extramuros de Pachacamilla, se situaba un barrio de antiguos esclavos angoleños que habían levantado una ermita dedicada al Cristo de los Milagros (cuya larga historia no vamos a relatar) y allí, “oyó” de nuevo la llamada que había sentido en Madrid. Postrado a sus pies decidió ser su “esclavo” para siempre. Consiguió comprar los terrenos aledaños a la ermita para edificar una iglesia más amplia; en ello se gastó 8.000 reales y dos años de trámites. Tras adecentar el lugar comenzó a nacer y crecer la Casa y Santuario del Santo Cristo de los Milagros. Allí a su lado vivió y fundó la Cofradía del mismo nombre. Se dice que “andaba vestido de pardo y con una caña en la mano al estilo ermitaño “pero se había conquistado el aprecio de todos. ( 20 )
Enterado de las dificultades de las Beatas Nazarenas les ofreció trasladarse al santuario donde fundaron el Monasterio de Madres Nazarenas Carmelitas Descalzas que allí permanece aún desde 1702.
Sebastian de Antuñano, comenzó desde 1687 – tras un fuerte y destructivo terremoto – unos recorridos procesionales con la venerada imagen del Cristo de los Milagros. La devoción se extendió como la pólvora y fue determinante para que el cabildo de Lima nombrase al Señor de los Milagros como Patrono de la Ciudad. Esto sucedió en 1715; ese año la procesión fue muy multitudinaria; tanto como lo son hoy día las que se celebran cada mes de Octubre.
Cuando Antuñano comenzaba a disfrutar del reconocimiento a sus esfuerzos, una extraña enfermedad debilitó sus fuerzas y murió en su “beaterio” en 1717 a la edad de 64 años. Sus restos reposan en el Santuario de Las Nazarenas, junto a su querido Cristo de los Milagros y lugar de eterna peregrinación.
4.3.- La Cofradía de Nuestra Señora de Aránzazu
Nació en Lima en el año de 1612. De los 150 fundadores, 49 eran vizcaínos y de ellos 5 eran de Balmaseda. Sus nombres: Sebastián de Allende; Francisco de Bedia y Juan de Bedia, hermanos; Severino de Cueto; Juan de Rado y Vedia.
Fue la primera Cofradía fundada en América y para ello compran una Capilla en el Convento de San Francisco de Lima, donde celebrar sus actos religiosos y poder enterrar a sus socios y parientes. Funcionó ininterrumpidamente hasta 1857, año en que contaba con 278 miembros. Pero se disuelve en 1865 pasando a depender de la Beneficencia Pública de Lima., en cuyos archivos constan todos sus datos históricos y económicos. ( 21 )
Idéntica Cofradía se fundó en México el 4 de Abril de 1681. La capilla adosada al monasterio de San Francisco comenzó a construirse en Enero de 1682 y se terminó en dos años. Llegó a ser muy rica y así, en el Inventario del año 1710 se explica como la Virgen de Aranzazu – que presidía el altar mayor – estaba vestida con un traje de 180 esmeraldas y el velo tenía 64 diamantes.
Las cuotas de los cofrades eran de 25 pesos anuales y su tesorería patrocinó numerosas Obras Pías, aunque no soportaba tener a mendigos y pedigüeños en sus puertas, lo cual acarreó no pocos problemas con las autoridades eclesiásticas. En 1734 comenzaron las obras del Colegio y Asilo y tras diversas vicisitudes, tanto con el Rey Fernando VI como con el Papa Clemente XIII, fue inaugurado por el Arzobispo de México el 3 de Febrero de 1767. Como albergue para 500-600 niñas pobres, doncellas y viudas sin recursos se le comenzó a llamar “El Colegio de Las Vizcaínas”, institución que aun existe y es sede de la R.S.B.A.P. de México. ( 22 )
5.- COMERCIANTES CON AMERICA: desde Sevilla y Cádiz
El monopolio del comercio con América del que disfrutó la ciudad de Cádiz desde 1717, fue sin duda el motivo principal que motivó a los inmigrantes en esta ciudad, donde los vascos llegaron a ser el segundo colectivo más importante, detrás de los propios andaluces. En los dos siglos anteriores, XVI y XVII, había sido Sevilla la receptora de estos comerciantes. Un eje, por tanto, Sevilla –Cádiz al que se unirá más tarde Jerez porque en cada siglo, hubo un balmasedano que descolló en estas ciudades: Juan de Urrutia en el siglo XVI; Gabriel de la Bárcena y Juan de Trucíos en el siglo XVII; los tres en Sevilla. En el siglo XVIII Felipe de los Heros en Cádiz y finalmente, Francisco de Orrantia, en Jerez de la Frontera, a mediados del XIX.
Todos los citados detentaron cargos Públicos en Concejos y Aduanas y servían de agentes de casas comerciales del País Vasco. El contingente de balmasedanos afincados en Sevilla ejerció un fuerte control en el Consulado de Cargadores, ocupando puestos directivo, al tiempo que formaban parte de los Cabildos – tanto civiles como eclesiásticos- de la ciudad hispalense.( 23 )
5- 1.- Balmasedanos en Cádiz, Siglo XVIII. Mandas testamentarias.
Nombre | Testamento | Natural de | Vecino | Ocupación |
Azuela y Velasco, Lorenzo de la (1) | 5.10.1774 | Balmaseda | Cádiz | Comerciante |
Marure, Francisco de (2) | 9.12.1754 | Balmaseda | Cádiz | Comerciante |
Villar, José del | 3.11.1761 | Balmaseda | Cádiz | Capitán de Navío (3) |
«»» | 23.1.1766 | « | « | Maestre de Fragata (4) |
«»» | 17.10.1771 | « | « | Comercio de Indias (5) |
(1).- Casado y con 3 hijos. Del Comercio de las Indias y matriculado en la carrera de ellas. Familiar del Santo Oficio de la Inquisición. Su sobrino, Juan Antonio de Llano y la Azuela residente en México, Reino de Nueva España.
(2).- Testa para viajar a Lima en el Navío «Nuestra Señora del Pilar».
(3).- Capitán y Maestre del Navío «La Concepción» próximo a partir a Veracruz. Albacea en las Indias tiene a Pedro Moreno y Gabriel de Arteaga.
(4).- Del Comercio de la carrera de Indias de Cádiz en la fragata » Santa Bárbara» próxima a hacer viaje al Mar del Sur y Callao de Lima.
(5).- Fue contramaestre de la fragata «Santa Bárbara». Tiene ganancias a riesgo en la provincia de Honduras.
( 24 )
Ampliar información en Encartados en Sevilla y Cádiz, siglo XVIII
5.2.- Vizcainías de Balmasedanos en Cádiz e Indias, siglo XVIII
Nombre | Vecino | Bautismo | Fecha Vizcainía |
Asunsolo y la Azuela, Lorenzo de (1) | Cádiz | 07/06/1740 | 01/03/1787 |
Fernández del Campo, Nicolás Manuel (2) | Jalapa de la Feria (N.E.) | 05/02/1741 | 12/07/1790 |
Puente Gallarza, Manuel de la (3) | Santiago de Chile | 14/12/1730 | 13/04/1775 |
(1).– Padre Joaquín, Balmaseda 13 /12/1701; Madre Francisca; Biznieto de Domingo Asúnsolo, Zalla 8/06/1625
(2).- Padre Francisco, Balmaseda 21/05/1698; Madre Manuela Ruiz Quintano
(3).– Padre Francisco, Madre Josefa
Ampliar información en Vizcainías de Encartados en Cádiz e Indias, siglo XVIII
6.- LOS FUNCIONARIOS:
Los vascos en general, y entre ellos los vizcaínos, tenían una gran influencia política en América, controlando desde cargos de responsabilidad una gran parte de la estructura administrativa española. El Ayuntamiento de Balmaseda en reconocimiento a su prestigio decidió concederles el titulo de Alcaldes Honorarios de la villa. En el periodo que comienza a mediados del S.XVII y termina con las independencias nacionales del XIX, un total de 25 balmasedanos recibieron ese honor, y aunque entre ellos abundan cargos militares, muchos fueron los civiles que lo recibieron . ( 25 )
AÑO ALCALDE AD HONOREM CARGO LUGAR
1669 D. Diego Machón de Ahedo ——– Puebla
1670 D. Bartolomé del Sabugal ——– Perú
1671 D. Sebastián de Allende Salazar ——– Indias
1742 D. Gregorio del Portillo ——– Caracas
1788 D. José de Urrutia Brigadier Indias
1792 D. Agustín Garcia Cap. Artillería La Guayra
1794 D. José de Zumalabe ——– Madrid
1796 D. Felipe de los Heros Asunsolo ——– Cádiz
1797 D. Nicolás Fdz. del Campo ——– Jalapa
1798 D. Manuel de los Heros Asúnsolo ——– Indias
1799 D. Nicolás de Antuñano Tte. Coronel Ejército —-
1800 Marqués de los Llanos ——– Madrid
1801 D. Manuel del Villar y Gorosabel ——– Vélez-Rubio
1802 D. Nicolás Fdz. y Mallo ——– Puebla
1803 D. Celestino Ortiz de la Riba Real Aduana Cádiz
1804 D. José R.de Antuñano y Terreros ——– Puebla
1805 D. Joaquín de Asunsolo y Azuela Gobernador Chile
1806 D. Juan Elguezabal y Machin ——— Chihuahua
1807 D. Francisco de Santiago y S.Pelayo ——— México D.F.
1815 D. Francisco de Retes y Heros ——– Lima
1816 D. Ramón de Basualdo y Villa Corte Madrid
1817 D. F.Javier Telechea y Allona Corte Madrid
1818 D. Martín de los Heros Com. Caballería Madrid
1819 D. Domingo Regoyos y Achocarro ——– —
1820 D. Andrés de Villa y Miranda ——– México
—————————————————————–
FUENTE: Archivo Municipal de Balmaseda – Libros de Decretos. Elaboración propia.
6.1.- Cargos Públicos
Con el paso del tiempo, varios balmasedanos llegaron a destacar en Altos Cargos de la Milicia, las Instituciones y la Administración colonial, dando con ello lustre a su tierra natal. Veamos a los más significativos :
– Francisco de SOPANDO MOLLINEDO , que en 1598 era el Secretario del Consejo de Indias
– Juan Joseph de SALZEDO, que en 1750 era Gobernador de la Isla de Trinidad
– Joaquín de los LLAMOS, que en 1767 era Beneficiado en la ciudad de Guatemala y al mismo tiempo ejercía de Comisario de la Santa Inquisición en Guatemala. Tenía una sobrina de 30 años, en Balmaseda, Mariana de Villarprego y Los Llamos, que profesó como novicia en el Convento de Santa Clara con una dote de 1.000 pesos de a 20 reales, dados por su citado tío. El envío lo efectuó su hermano Francisco Javier que desde 1756 vivía y servía en la casa de su tío el Comisario LLamos.
– Joaquín de ASUNSOLO y la AZUELA , que en 1805 era Gobernador de Chile ( 26 )
– Juan Nepomuceno de la QUINTANA Y ANTUÑANO, que en 1822 era Gobernador de Cuba. D. Juan Nepomuceno había nacido en Antequera de Oaxaca (México) pero se casó con una balmasedana, Nicolasa de Antuñano, siendo ambos oficialmente vecinos de la villa. Su hijo, José María de la Quintana, Coronel del Ejercito destinado en Logroño, también nació en Balmaseda.
– Francisco de BALMASEDA, escribano de cámara de su Majestad en el Consejo Real de las Indias dice “que sirve a más de 32 años en la secretaría del Consejo y 12 años sirviendo los dos oficios de Gobernación y Justicia juntos por ausencia en enfermedad y muerte de Ochoa de Luyando, que se halla pobre y con derecho a una escribanía en las minas de Pachuca en Nueva España”. Fue nombrado. Año 1580
– Diego de URRUTIA, almirante “que ha servido en el mar y carrera de las Indias desde 1584 a esta parte y en 1607 salió por almirante de la flota de Tierra Firme”. En el juicio de residencia no tuvo cargo alguno. En 1614 pidió un hábito y sueldo que había ganado como almirante. Natural de la villa de Balmaseda en el Señorío de Vizcaya. Más de 30 años de servicio. Memorial, muchos papeles. Madrid, 3 de agosto 1622
– Francisco de HERBOSO y LUZA , nació en Lima en la segunda mitad del siglo XVII. Era hijo de Francisco de Herboso y Ochoa de Asúnsolo, Caballero de la Orden de Santiago, nacido en Balmaseda en 1639; y de la dama limeña Antonia de Luza. Francisco sirvió con grado de Capitán en el presidio de Valdivia. Entró en la carrera burocrática desempeñándose como Contador real Mayor del tribunal de Cuentas, Consejero honorario de Hacienda y en 1715, Presidente de la Audiencia de Charcas. Caballero de Santiago, falleció en Chuquisaca hacia 1732. Era suegro de Matías de Astoraica, contador real.
– Luis de BALMASEDA, natural de La Habana, teniente de caballos de aquella ciudad. Treinta y dos años de servicio en la Habana hasta 1710, con plaza de soldado y teniente. Madrid, 30 en. 1714
– Joseph del CAMPO ARNAEZ, sargento mayor de las Islas Marianas, natural de Balmaseda y finó con testamento en Binondo en Filipinas. Año 1783. ( 27 )
6.2.- Cargos Eclesiásticos
– Julián de BALMASEDA, clérigo-presbítero del obispado de Cuba y tenencia de cura de la iglesia parroquial de la ciudad de La Habana. En 1648 era teniente y estuvo presente en el contagio de la ciudad en 1649. Hijo de Agustín Hurtado de Balmaseda y de Ana de Cartagena y Leiva, natural de isla de Jamaica. Fue su padre Alcalde y Procurador General de ella. Información hecha en La Habana en 1658. Madrid, 25 may. 1659
– Miguel de LABARRIETA , licenciado, cura de la Doctrina de Loraya, vicario, juez eclesiástico y comisario de la Santa Cruzada de la Provincia de Aymaraes en el obispado de Cuzco. Natural de la ciudad de Lima, nacido en 1668, colegial de aquella ciudad, bachiller y licenciado en cánones. Hijo del capitán Nicolás de Labarrieta, natural de Balmaseda y Sebastiana de Medrano y Salazar, nieto por línea paterna de Agustín de Olavarrieta, y Sebastiana de Zumalabe. Madrid, 5 sept. 1711. Miguel Antonio de Errazquin.
– Juan Joseph ORTES DE VELASCO, bachiller, examinador sinodal del obispado de Oaxaca, cura del Sagrario de la Iglesia Catedral de Antequera en Nueva España. Estudió en el Colegio de la Compañía de Antequera. Hijo de Martín Ortes de Velasco – caballero de Calatrava, natural de Balmaseda – y Mª Ruiz de Torres, vecina de Antequera. Madrid, 29 octubre 1749
– Joseph Antonio de ARECHE y ZORNOZA, doctor, colegial en el de Santa Catalina Mártir de los Verdes de la Universidad de Alcalá de Henares, natural de Balmaseda, obispado de Santander. Bachiller, licenciado y doctor en cánones, disfrutó de varias cátedras. Madrid, 20 de sept. 1757.
– Pedro ALCANTARA de la QUINTANA, doctor canónigo de merced de la Santa Iglesia Catedral de Antequera de Oaxaca en la Nueva España. Originario de la ciudad de Antequera, valle de Oaxaca en Nueva España. Hijo de Juan de Quintana – natural de Balmaseda en las Encartaciones y Alcalde ordinario que fue de Antequera – y D.ª Petronila Ortiz de Velasco, natural de ella, nieto de Juan de Quintana y María de los Heros y Llanos, vecinos de Balmaseda y por la materna lo mismo ( libro de genealogía ) Abogado. de la Real Audiencia de la Nueva España, catedrático de Filosofía, examinador sinodal. Madrid, 28 enero. 1767. ( 28 )
7.- LOS PIONEROS DE LA TÉCNICA: EN MÉXICO
7.1.- Industria Textil: Esteban de Antuñano
Brevemente citaremos a ESTEVAN (sic) DE ANTUÑANO quien a pesar de no haber nacido en Balmaseda, tenía familia en la villa y ha dado a conocer este apellido balmasedano en todo el mundo. Nacido en Veracruz, el 26 de Diciembre de 1792, hijo de un acaudalado con ascendencia vizcaína, su primera educación la recibió en España donde vivió con su tío paterno Miguel de Antuñano En el País Vasco conoció la industria vascongada y de allí pasó a Inglaterra donde advirtió la transformación de la minería, de la agricultura y sobre todo de los textiles de lana y algodón. Durante su estancia inglesa se familiarizó con las ideas económicas de Adam Smith.
En 1812, con solo 18 años, ya estaba de regreso en Veracruz. Se instaló como próspero comerciante en su puerto y se casó con Bárbara Avalos y Varela, joven heredera de la élite criolla local cuyo padre era un rico hacendado de la región de Atlixco en Puebla. Al tiempo llegó a un alto largo en el nuevo Ayuntamiento tras la Independencia del país.
Casi todo fueron problemas para este emprendedor, aunque recibió ayuda del Banco del Avío, fundado por Lucas Alamán para fomentar la industria. Lo más dificial fue conseguir la maquinaria para su fábrica en Puebla. Cuando ya consiguió ponerla en marcha, primero “ La Constancia Mexicana “ y posteriormente “La Economía Mexicana”, se convirtió en el principal industrial de su época e hizo incursiones en otros sectores industriales como la loza fina, el papel o el vidrio.
Escribió numerosos libros sobre economía y políticas industriales, fruto de sus años en Inglaterra. Consiguió que se prohibiera la importación de textiles extranjeros y abrió nuevas fábricas. Llegó a ser reconocido como “el fundador de la industria fabril mexicana “. Murió el 7 de Marzo de 1847, cuando las tropas de Estados Unidos tomaban la ciudad de Puebla. Y lo hizo en famosa Casa de los Muñecos donde residía. ( 29 ).
7.2.- Primer Telégrafo: Juan de la Granja
JUAN DE LA GRANJA nació en Balmaseda en el año 1785, donde sus padres eran dueños de una fundición de hierro dulce y por ello pudieron darle una buena formación, que había de comenzar por estudiar Comercio en Madrid. Permaneció en la capital de la corte hasta que la situación política en 1814, con el regreso de Fernando VII, se le hizo insostenible y decidióexiliarse a América – de edad de 29 años – a donde llegó por el puerto de Veracruz. En la capital azteca instaló un comercio y las actividades mercantiles le llevaron por todo el país y por Estados Unidos. Para que sus empresas fueran protegidas por México en sus negociaciones con los Estados Unidos, pidió y recibió la nacionalidad mexicana e ingresó en el Cuerpo Consular de su nuevo país.
Pero tampoco eran buenos tiempos en México, con el estallido de la guerra de Independencia con España. Por ello se traslada a EE.UU, desde donde regresará a México D.F. en 1820. No tuvo mucha suerte pues la independencia mexicana de 1821 le obligaría a exiliarse de nuevo en el país vecino del Norte. Se instaló en Nueva York, donde – con imprenta y librería propias – fundó un periódico “El Noticioso de Ambos Mundos “, con el que trató de defender los intereses tanto españoles como mexicanos, habiendo sido el primer diario en idioma español que se fundó en esta gran ciudad en agosto de 1838.
Ayudo enormemente a los exiliados españoles que arribaban a México y por sus servicios a la nación mexicana fue nombrado Cónsul General de México en los Estados Unidos el año 1842, de donde regresaría nuevamente cuatro años más tarde, debido al deterioro de las relaciones entre ambos países .
Fue en Nueva York donde presenció la puesta en operación de la primera línea telegráfica en el mundo, lo que despertó en él un enorme interés por llevar tan novedoso y útil medio de comunicación a México. Y como buen comerciante enseguida advirtió los beneficios que tal servicio habría de dar a México y la posibilidad, para él, de realizar un buen negocio.
Se instala en Querétaro, nueva capital de la nación, y sigue dedicándose al comercio, hasta que es nombrado Diputado por Jalisco en el Congreso Nacional de 1848. Allí conoció a Lucas Alamán (que buscaba una monarquía para su país) y también fue allí donde vio la oportunidad de poner en marcha su proyecto tecnológico. En 1849 obtuvo la concesión en exclusiva para introducir la comunicación por Telégrafo en todo México, con el plan de unir en una primera línea México D.F. con Veracruz y ambos con Acapulco. La primera demostración pública del aparato fue el 13 de Noviembre de 1850 y el primer tramo se inauguro el 5 de noviembre de 1851, siendo el general Mariano Arista, Presidente de la República, y Juan de la Granja, el primer Director General de Telégrafos. Se abrió el tramo entre D.F. y Nopalucan, en el estado de Puebla.
Con tantas vicisitudes, Juan de la Granja cayo enfermo de pulmonía, de la que murió el 6 de marzo de 1853. Sobre su tumba consta el siguiente epitafio: “Juan de la Granja, natural de Balmaseda, ciudadano mexicano. El primero que estableció en la Republica el telégrafo electro-magnético». ( 30 )
8.- LOS EMPRENDEDORES QUE REGRESARON:
El principal motivo para ir a “hacer las Américas “en el siglo XIX, es más una huida que otra cosa. Cierto es que antes se rehuía la pobreza (cosa no era del todo exacto en el caso de Balmaseda), pero ahora se huye de una falta de futuro en el caserío; se huye de las Guerras Carlistas y sobre todo del Servicio Militar obligatorio desde 1876. Si a esto se une el espíritu emprendedor del vasco y – muy a menudo – la llamada de otro familiar emigrante, la cuestión ya no tiene vuelta de hoja. Los emigrantes tratan siempre de volver a su tierra originaria, pero no todos lo consiguen. Sin embargo, aunque este sueño de su vida no puedan hacerlo realidad, jamás pierden del todo los lazos de unión con su villa natal. Es este un sentimiento recíproco constatado, entre Balmaseda y sus hijos instalados en América. Pero lo cierto es que estos emigrantes viven en una doble condición de vasco y americano, que les lleva a añorar toda su vida aquello que algún día dejaron atrás. ( 31 )
Una buena parte de los que amasaron verdaderas fortunas y decidieron volver años más tarde a su lugar natal, se prestigiaron, comprando y rescatando antiguas casonas ó bien construyendo palacetes de nueva planta, en un estilo colonial o ecléctico muy vistoso, que se distinguían además por las palmeras y elementos tropicales que ornaban sus jardines como símbolo de su aventura en tierras americanas y que las identificaba de inmediato como «casonas de indianos”. En Balmaseda aún quedan algunas y otras han desaparecido.
Vamos a terminar esta ponencia hablando sucintamente de tres hijos de la villa de Balmaseda que, ya de mayores, regresaron desde América a su villa natal, a la que aportaron una gran cantidad de dinero. Pío Bermejillo y Martín Mendía ofrecieron desinteresadamente caudales en beneficio de la instrucción pública de la villa y otros temas de importancia. Con ello se hicieron merecedores de una Calle , la antigua calle Bajera cambió su nombre a favor de Pío Bermejillo, y de un Paseo, el que une ambos puentes modernos por la margen fluvial derecha, el hermoso Paseo de Martín Mendía. El tercero, Marcos Arena Bermejillo invirtió su dinero de forma muy inteligente, levantando la Fábrica de Boinas la Encartada. De cada uno vamos a ver su trayectoria vital y final.
8. 1.- Pío Bermejillo e Ybarra y su hijo Pío Bermejillo y Martínez-Negrete
No se puede hablar de los Bermejillo sin referirnos mínimamente al que fue su introductor en Guadalajara: Francisco Martínez-Negrete y Ortiz de las Rozas que salió para México con veinte años en 1817. La base económica de su fortuna comenzó con su familia, vinculando gente a sus negocios por medio de parientes activos, tanto en la sociedad como en la economía y la política de Guadalajara.
Este encartado, nacido en Lanestosa en 1797 tuvo de su segunda esposa – Josefa Alba Ortiz de Rozas – ocho hijos de las que seis fueron mujeres. La composición mayoritariamente femenina de la familia Martínez-Negrete y Alba, implicó una apertura de las empresas hacia otros miembros connotados de la sociedad tapatía. Así la hija mayor, Dolores, se casó con José María Bermejillo e Ybarra.; Ignacia, casó con su cuñado Pío Bermejillo e Ybarra; Josefa y Rosalía se casaron con los hermanos Justo y Manuel Fernández del Valle y Álvarez; y la última hija, Francisca, lo hizo con Agapito Fernández Somellera. Sin duda que todos los consortes eran importantes miembros de las familias mas conocidas de Guadalajara.
Poco a poco, los yernos se incorporaron a los negocios de la familia M. Negrete; tanto que, en 1862, Manuel F. del Valle y J. María Bermejillo pasaron a formar parte de la Casa Comercial Martínez-Negrete y Cía. Entre todos fueron adquiriendo propiedades rústicas y urbanas que les servían de aval para la petición de créditos. Además de comerciantes se convirtieron en industriales textiles mediante la compra de fábricas en apuros o en herencias. También de fábricas de jabón, harina, aceite y hasta refrescos. ( 32 )
Con los ingresos formaron grandes capitales en base a los cuales se fueron convirtiendo en prestamistas, de tal manera que ayudaban a instituciones y altos cargos del Gobierno cuando lo necesitaban. Y por ello eran cuidados por las altas esferas. Los préstamos también se hacían a los particulares, con preferencia a los pequeños comerciantes; y no puede hablarse de usura, puesto que aún no existían los Bancos oficiales y ellos ejercían esa labor. Solían prestar al crédito del 9% cuando muchos lo hacían al 12-13%. Y cierto es que con los morosos irrecuperables, se fueron haciendo con propiedades de todo tipo que asentaron aún más su fortuna y poder.
Pío Bermejillo e Ybarra había nacido en Balmaseda en Julio de 1820 y llegó a México antes de 1850. Era una persona con carácter y arranque, que sin duda estaba dispuesto a hacer fortuna en América, y más en una sociedad como la que acabamos de describir. Don Pío se distinguió por su visión empresarial, pues formó una Casa Comercial, Bermejillo y Cía., que abarcó un gran número de negocios: comercio, banca, industria algodonera, empresas eléctricas, minería y agricultura. En la década de los 60, Don Pío se destacó por su participación en el sector agrícola, ya que fue uno de los principales compradores de los bienes que pertenecieron al clero. Así adquirió diversas tierras en el Estado de Morelos, desarrollándose como un importante empresario azucarero ( 33 )
En 1865 Pío Bermejillo compró la fábrica “La Magdalena Contreras”, correspondiente al ramo textil, la cual se encontraba en graves problemas financieros. Sin embargo, durante el tiempo que fue su propietario, esta fábrica incrementó sus niveles de producción, gracias al respaldo económico y a la innovación tecnológica que ofreció.
Para entonces la Casa Comercial Bermejillo y Cia, era propietaria de diferentes bienes inmuebles, de las haciendas El Calvario (Michoacán), Pedernales (Michoacán), de la hacienda y la mina La Gloria (Durango), de gran número de acciones de la empresa minera Peñoles, de acciones de la compañía Encino, de la compañía minera anónima “La Candelaria y anexas” (Zacatecas), entre otras. En cuanto a su participación en la actividad financiera, Pío Bermejillo e Ybarra, junto con su hermano José María, compró acciones del Banco Nacional Mexicano y del Banco Mercantil Mexicano. Para 1886 José María era uno de los mayores accionistas de ambos.
Pío Bermejillo e Ybarra se casó en 1853 con María Ignacia Martínez–Negrete y Alba y en 1861 lo hizo José María con su cuñada María Dolores. Por tanto, todo lo que hemos contado fue llegando por añadidura. Cabe decir que ellos fueron 11 hermanos y que Pío tuvo 11 hijos a los que procuró buen casamiento, siguiendo el eficaz ejemplo de su suegro D. Francisco.
Su hijo Luis Bermejillo y Martínez-Negrete casó con Lorenza Braniff. Venido a España fue designado Senador en Marzo de 1916. El Rey Alfonso XIII le hizo Marqués de Mohernando. Otro hijo, Francisco, se casó con Julia Schmidtlein y también fue designado Marqués de Bermejillo del Rey por Alfonso XIII. En Madrid se construyó un hermoso palacio que debió vender cuando estalló la Revolución Mexicana. Por último su hija Amelia, cautivó al Duque de Tovar con el que se casó en 1891 siendo, además, Dama de la Reina Victoria Eugenia.
A su muerte Don Pío dejó una gran fortuna a sus herederos, Ángela, Javier, Pío, Emilia y Luis Bermejillo y Martínez-Negrete, así como todos los bienes propiedad de la Compañía Bermejillo. Desconozco si en su testamento dejó mandas para su villa natal. Quien si las dejó fue su hijo Pío Bermejillo Martínez-Negrete que murió en Paris, siendo súbdito mexicano, soltero y sin hijos el 9 de Abril de 1900. ( 34).
En su testamento, hecho en Paris con fecha 13 de Marzo de 1899, Pio Bermejillo y Martínez –Negrete, deja 70.000 pesetas para el Hospital de la Villa que socorre a pobres y enfermos. Otras 70.000 pesetas para la educación primaria de los niños y niñas, todo en Balmaseda El resto de su fortuna lo lega a la familia, nodriza y sirvientes. Está enterrado en la parroquial de San Severino en un elegante y sencillo sepulcro obra de Agustín Querol, realizada en 1910 y con diversos componentes modernistas.
8. 2.- Martín Mendía y Conde. Su Escuela de Comercio
Posiblemente, Martín Mendía sea el Indiano más conocido y querido por todos los balmasedanos. No es de extrañar, puesto que su estatua sedente preside la Plaza de San Severino y podemos verle cada vez que la cruzamos. Cabe preguntarse por qué es tan querido. Luego lo veremos. Martín Mendía y Conde había nacido en Balmaseda el 5 de Febrero de 1841, en una modesta casa de la calle Correría. Era hijo de Pedro León de Mendía, natural de la villa y de Vicenta de Conde, natural de Villasana de Mena. Ante el escaso futuro que se percibía, decidió emigrar a América. Muy probablemente porque otros comerciantes balmasedanos estaban ya trabajando en Mazatlán, México, fue allí donde decidió instalarse para dedicarse al comercio y otras actividades, con las que amasó una considerable fortuna.
La situación geográfica de Mazatlán convirtió a este puerto en el más importante del occidente mexicano, por donde entraban los grandes buques de cabotaje desde principios del siglo XIX. Fue por tanto el gran puerto comercial sobre el océano Pacífico y solamente el auge de San Francisco en la California de Estados Unidos consiguió hacerle sombra. A partir de 1840 comenzó el asentamiento de comerciantes extranjeros; ingleses, franceses y alemanes principalmente. Y también españoles; entre ellos los Somellera que giraban en la órbita de los Martinez-Negrete de Guadalajara. ( 35 )
Allí comerciaba también Juan Bautista Hernández y Gorrita, nacido en Balmaseda hacia 1834 que se asoció con otro balmasedano Martín de Careaga y la Quintana que, llegado a Mazatlán casó con Laura Acuña Osuna con quien tuvo 7 hijos. Precisamente, ambos comerciantes son los bisabuelos de Dª. Teresa Patrón de Letamendi – persona muy activa de la cultura y tradiciones vascas en Sinaloa – a quien quiero agradecer el envío personal de los siguientes datos familiares que no he querido modificar.
“En el año de 1866 los señores Juan Bautista Hernández y Gorrita, Joaquín Redo, quien era senador, y Martín y Julián Mendía y Conde, ex socios en «La Voz del Pueblo» se unieron para formar una distinta sociedad por su única cuenta. La elección que tuvieron para la situación de su finca no podía ser más acertada, pues adquirieron un edificio en el centro de la Calle Principal, el que edificaron casi de nuevo y completo y conformando el establecimiento más importante y más lujoso de Mazatlán. Se llamaba “La Torre de Babel”.
El socio principal es el señor don Julián Mendía, español, residente en Barcelona, donde atiende a todas las transacciones que hace la casa con Europa, ya sean de compra o de venta, ya sean de carácter bancario. Los señores Hernández, Mendía, Sucs., son en efecto importadores y banqueros, operando sobre todas las principales plazas de la Republica, Nueva York, San Francisco. Londres, París. Hamburgo, Madrid, Barcelona, Bilbao, etc; y son agentes de varias líneas de vapores entre Europa y América, así como compañías de seguros marítimos.
Los socios que siempre residen en Mazatlán son: el señor don Genaro García Chavarri, (nacido en Madrid, hijo de madre balmasedana), Presidente de la Compañía Minera de Pánuco, los señores Maximino Rivero, Víctor Patrón Hernández y Eduardo Villanueva. Todos ellos inteligentes y altamente apreciados “. ( 36 )
Juan Bautista Hernández regresó a España antes de finales del siglo XIX y Martín Mendía lo hizo en Julio de 1923 a la edad de 82 años y aún soltero. Nunca se había olvidado de su tierra y muestra de ello es la Donación que en 1892 hizo a la parroquia de San Severino: un magnífico Órgano de la mejor marca europea de la época: un Aristide Cavaillé – Coll, fabricado en París y montado por Charles Mutin, por el que pagó 35.000 pesetas. Martín Mendía visitaba con frecuencia Paris y estaba al día de lo último en tecnología que allí se presentaba. Fue precisamente en 1911 cuando mandó traer de Francia un avión Deperdussin – que había comprado – y con el que fue uno de los primeros “mexicanos” en volar en aeroplano cuando tenía 72 años. ( 37 )
Fue el 16 de Junio de 1924 cuando dicta testamento ante el notario de Madrid Dímas Adanez, en el que recuerda tanto a su villa natal como a la de su madre que era menesa. De dicho documento, que es largo y prolijo, vamos a destacar solamente lo que donó a Balmaseda:
-En 1920 mandó a su sobrino Pedro de Asúa y Mendía,sacerdote y arquitecto, construir un hermoso edificio para albergar las Escuelas Mendía, donde se podía realizar lo que hoy sería una formación profesional. El 9 de diciembre de 1924 se escrituraron las Escuelas ante el notario de Bilbao, Celestino del Arenal. El coste fue de 175.000 pesetas. Fueron encomendadas a los Hermanos Maristas que las dirigieron durante 76 años y por falta de alumnos las cerraron en 1996. ( 38 )
– Destinó 60.000 pesetas al Hospital de la Villa para ayuda a los enfermos menesterosos.
– Donó 50.000 pesetas a las Hijas de La Cruz con colegio en la villa.
– Aportó 20.000 pesetas a los Padres Corazonistas para ayudarles a terminar su convento.
– Al Ayuntamiento destinó 10.000 pesetas para Saneamiento de los barrios de La Magdalena y El Cubo.
-50.000 pesetas para hacer un Paseo entre los dos puentes, en la misma forma del ya construido a expensas del testador.
Todas las mandas restantes fueron para hospitales, asilos, colegios especiales é instituciones diversas, siempre de tipo benéfico o caritativo. Por último Mendía dejó 570.000 pesetas para comprar acciones del Banco de España y con sus intereses mantener la Fundación de sus Escuelas a lo largo del tiempo. Del resto aún quedó bastante para su familia y servidores.
Martín Mendía y Conde, gran benefactor de Balmaseda, falleció el sábado 6 de Septiembre de 1924. Su entierro fue una impresionante manifestación de duelo de toda la villa que recaudó dinero para elevar la estatua sedente desde la que saluda cada día a los balmasedanos. ( 39 )
8. 3.- MARCOS ARENA BERMEJILLO
Natural de Balmaseda en cuya parroquia de San Severino fue bautizado el 26 de Abril de 1850, Marcos era sobrino carnal de Pío Bermejillo e Ybarra. Hijo de su hermana mayor Melchora Bermejillo Ybarra que, nacida en 1818 en Balmaseda, se casó el 4 de Junio de 1840 – a la edad de 22 años – con Alejandro Arena Ribas.
Marcos Arena Bermejillo, casó a los 32 años con Elena Canesi Vallarino de 24 años y nacida en Veracruz. La boda se celebró en la parroquia de San Miguel Arcángel de la ciudad de México. Quiere esto decir que aunque nacido en España, estaba ya instalado en tierras mexicanas. Eran 10 los hermanos Arena Bermejillo, de los que cinco se casaron en México y solo dos hermanas – Cristina y Lucía – lo hicieron en Balmaseda, con vecinos de esta villa.
En México tuvo a sus dos hijos José y Luis Arena Canesi, y siendo éstos pequeños regresó a su tierra natal, con una ya considerable fortuna que tenia intención de invertir en la creación de un negocio textil en Balmaseda. No en vano había visto nacer este tipo de industria en México y, pensando en su tierra, no lo dudó ni un momento. Entró en contacto con otros vecinos y compañeros y en 1892 se puso manos a la obra. El negocio no fue solamente suyo, porque participaron también Martín Mendía y Conde, Juan Bautista Hernández y Gorriti, entre otros, pero Marcos llevó siempre la voz cantante y pareciera casi únicamente obra suya. El primer Consejo estuvo presidido por Martín Mendía, siendo Marcos Arena el Director Gerente.
La Fábrica de Boinas La Encartada se situó en el Barrio del Peñueco, aprovechando la base de una ferrería que el Concejo de Balmaseda había instalado allí a fines del siglo XV. Luego fue vendida a particulares y a mediados del XIX fue remodelada y convertida en molino de cuatro pares de muelas. Su concesión y salto de agua sería aprovechado después por la nueva fábrica.
Los tejidos fabricados inicialmente fueron exclusivamente Boinas, cuya producción se vendía en mercados no cercanos. Más tarde se confeccionaron mantas y – con la Guerra Civil – material de abrigo para las tropas. La maquinaria procedía íntegramente de Inglaterra y los obreros llegaron en parte del Valle de Mena y en parte de la propia villa. Se fundó la Sociedad con un Capital inicial de 500.000 pesetas y un duración de 50 años. Al edificio fabril de gran tamaño, se añadieron las viviendas de obreros, una capilla que a veces hacía las veces de escuela, y espacios para el esparcimiento. ( 40 )
Los cambios de la moda en el vestir y otras vicisitudes económicas abocaron al cierre de la fábricaen 1992. Por tanto había cumplido un siglo exacto de vida. Las instalaciones aunque necesitadas de una restauración, mantenían sobre todo la maquinaria inicial en excelente estado. Se pensó en darle un uso no industrial a la que fuera magnifica fundación indiana. Tras varios años cerrada y diez años más de restauración integral, nació en 2006 la Fundación Boinas La Encartada – Kultur Ingurunea, con el objetivo de conservar, difundir y gestionar el enclave de la antigua Fábrica . Por fin el 10 de enero de 2007 se abrió al público con el nombre de Museo Textil de la Industria Vasca. Le deseamos una larga vida.
CONCLUSION
Una villa de tan solo 580 vecinos en el año 1695; y con 2.410 habitantes en el año 1857 aportó un contingente considerable a la emigración a ultramar.
En su mayoría fueron gente emprendedora que no se resignaban al futuro incierto de su época. Los balmasedanos, al igual que los vizcaínos, se integraron en América tanto en el funcionariado como en el comercio .y las relaciones mercantiles.
Este trabajo que comenzó siendo una tímida toma de datos, totalmente referencial, en los análisis da las actas sacramentales de la parroquia ha ido adquiriendo proporciones muy interesantes con el tiempo de investigación. No damos por concluido este tema pues hemos detectado flecos en otros países americanos que vale la pena proseguir.
Esta ponencia, es un anticipo de una investigación de mayor envergadura que abarca a todos los Encartados relacionados con América. Esta web irá mostrando el avance de los trabajos relativos a estos temas.
APENDICE
OTROS BALMASEDANOS RESIDENTES EN AMERICA
AÑO NOMBRE LUGAR
1723 Gaspar de Terreros y Francisca de Antuñano Indias
1760 José de Larrazabal, natural de la Villa Lima
1776 José de Lanzagorta México
1808 Manuel de los Heros y Asunsolo Lima
1818 Julián Joaquín de Riva y del Corte Río de la Plata
1821 Juan de Yandiola y Olabarrieta Durango (México)
1832 María Concha de Tordesillas, natural del
Reino de Lima en la Nueva España,
Casada con Manuel Felipe de Antuñano. Lima
1834 Doña Josefa de las Bárcenas, natural de
Lima, de 41 años. Vda. de Pedro de Llano. Lima
1848 Bernardo Fernández Gauna La Habana
1852 Micaela Ruiz de Bustamante, natural de
Chihuahua, murió en 1855. Chihuahua
1852 Jose Fernández Yarte La Habana
1855 Francisco de la Tejera y Jangui La Habana
1856 Castor del Acebal Inarritu México
1858 Martín Mazón Pérez Buenos Aires
1860 Pablo Sarriegui e Ibarra México
1862 Claudio Rufrancos Dúo Buenos Aires
1863 Castor Acebal Inarritu La Habana
1867 Miguel Tellechea Machín La Habana
1877 Celedonio e Ignacio Iglesias y Arteaga La Habana
1879 Mariano Orrieta Ibarra La Habana
1879 Pablo Ibarra Ibarra México
————————————————————————————-
FUENTE: Archivo Parroquial de Balmaseda. Libros de FINADOS.
Elaboración propia. www.balmasedahistoria.com.
NOTAS
( 9 ).- Los Jesuitas sustituyeron a los Dominicos que abandonaron Juli en 1574 por discrepancias con la política del Virrey Francisco de Toledo Así los jesuitas se harían cargo de Juli el 9 de noviembre de 1576, con la idea de formar un seminario de lenguas para capacitar a sus religiosos en los idiomas indígenas de la región. Edificaron casi todas las iglesias que aun subsisten y que están declaradas como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
( 10 ).- Ramón Gutiérrez “Historia urbana de las Reducciones Jesuíticas Sudamericanas: continuidad, rupturas y cambios (siglos XVIII-XX)”. La misión jesuítica de Juli (Perú) pp. 14 y ss.
(11 ).- A.G.I. Contratación. Expedientes 267; 573; 319; 464; 614; 5702.
( 12 ) Archivo Municipal de Balmaseda. ( A.M.B. ) Libro de Decretos, Reg 13, f.17v, de 20 de Setiembre de 1573. Además en A.M.B. Libro del Arca de Misericordia, Reg 12.
( 13 ).- Ver GOMEZ PRIETO, J. “Vida y Economía del monasterio de Santa Clara de Balmaseda: 1666-1984. Estudios de Deusto, 1988, pp. 481-494. También en Archivo Convento Clarisas Balmaseda. ( A.C.C.B. ) Libro de Fundación del Convento, s.f.
( 14 ).- A.C.C.B Testamento de Juan de la Piedra. Año 1643. El litigio en Archivo Histórico Nacional ( A.H.N.). Consejos. Leg 1749/25 Año 1793.
( 15 ).- Archivo Parroquial de Balmaseda ( A..P.B.) Libro de Capellanía de Trucíos. s.f. Año 1627.
( 16 ) .- A.P.B. Papeles varios II, leg 3, año 1634.
( 17 ).- A.M.B. Libro de Acuerdos, Reg.21, f.97.año 1797
( 18 ).- A.M.B.Libro de Acuerdos, Reg.64, f.8. Decreto 5 Mayo 1852.
( 19 ).- A. BRETOS M .” Matanzas: The Nobody Knows Cuba” (University of Florida Press),
( 20 ). Archivo General de los Carmelitas Descalzos. Vitoria. Papeles varios . Tambien en VARGAS UGARTE, R. “ Historia del Santo Cristo de los Milagros”. Lima 1984.
( 21 ).- IGARTUA, Francisco. “Diccionario Histórico Biográfico de los Vascos en el Perú…”. Euskal Etxea de Lima. Año 2011
( 22 ).- MURIEL, Josefina. “Los Vascos en México y su Colegio de las Vizcaínas”. U.N.A.M. 1987
( 23 ).- GARCIA FUENTES, L. “El comercio español con América: 1650-1700”. Sevilla 1980, pp.86-87. Muy buena la obra de MARTINEZ DEL CERRO, V. E. “Una comunidad de comerciantes: navarros y vascos en Cádiz. Segunda mitad del siglo XVIII”. Junta de Andalucía. CES, Sevilla 2006.
( 24 ).- GOMEZ PRIETO, J. “El eje Bizkaia – Sevilla / Cádiz – América. El papel de los Encartados en la Emigración y el Comercio con América: SS. XVI al XIX”. Beca “Los Vascos y América “ 1992. Inédito. Magnifica la obra de GARMENDIA ARRUABARRENA, José. “Cádiz, los vascos y la carrera de Indias”. Eusko Ikaskuntza, D. L, San Sebastián, 1989.
( 25 ).- GOMEZ PRIETO, J.” Emigrantes, Indianos y Fundadores”. En “Balmaseda, una historia local”. Dip. Foral Bizkaia, 1991. pp. 57-72.
( 26 ).- GOMEZ PRIETO, J. “Vida y economía del Monasterio de Santa Clara de Balmaseda: 1666-1984”. Letras de Deusto, nº extra 1988, pp.245-255
( 27 ).- GARMENDIA ARRUABARRENA, J. Diccionario Biográfico Vasco. A.G.I., Indiferente General nº 1230; 1263; 139; 5685.
( 28 ).- GARMENDIA ARRUABARRENA, José. Guía de vascos en el Archivo General de Indias de Sevilla. RSBAP, Delegación en Corte, Madrid, 1998.
Es obligado señalar aquí la ingente obra que GARMENDIA ARRUABERRENA, J. ha realizado sobre los vascos en los archivos andaluces con muy importantes estudios y conclusiones. .Ver los Boletines de la R.S.B.A.P. Ver A.G.I.
©Copyright 2012. Julia Gómez Prieto. Todos los derechos reservados